Estamos en buena época para hacer conservas y utilizarlas cuando nos venga bien. Yo he preparado unos botes con asado de verduras. Tan solo hemos de darles el punto deseado en el horno, limpiarlas o pelarlas e introducirlas en frascos de cristal hasta arriba. Completamos el llenado con el jugo del asado. Cerramos bien e introducimos en una olla que podamos llenar de agua y los tarros queden bien cubiertos. Ponemos al fuego y, cuando el agua empiece a hervir, contamos 20-30 minutos. Apagamos el fuego y dejamos los botes en su interior hasta que el agua esté fría del todo. Sacamos los tarros, escurrimos, secamos bien y ya están listos para etiquetar y guardar en la despensa. Nos vendrá genial echar mano de ellos y encontrar que con solo abrirlos y aliñar tendremos un plato de verdura estupendo para acompañar otra preparación o degustar solo. ¿Vosotros soléis preparar conservas? ¡¡Contadme!!
