Desde que Patri había visto aquí en el blog una de mis pizzas tenía ganas de probarla y, por fin, una vez que han acabado con todos los líos de la boda, vinieron a casa a probarlas.
La masa la hice con la panificadora, al igual que en otras ocasiones y, simplemente, la estiré y coloqué por encima los ingredientes elegidos para la ocasión, luego al horno y a la mesa a degustarlas. Les gustaron mucho.
A ésta le puse tomate, jamón york, champiñón laminado, huevo duro y queso.
La masa que sobró de estirar la anterior sirvió para preparar otra más pequeña, esta vez con tomate, jamón york, chorizo ibérico y jamón serrano.
Que ricas... a mí la pizza me encanta y les daría un buen bocao a las tuyas.
ResponderEliminarBesitos,
Que buena pinta tiene esa pizza y la tarta de pera cada vez te superas mas, Besitos
ResponderEliminarMuchas gracias, bichillo y vicen. Besitos.
ResponderEliminartocc ttocc ¿queda piza? jejeje
ResponderEliminarVaya pinta que tienen y acompañadas con una sangría uhmmm que rico. Me voy a tener que ir a comer... jejeje
Besitos.
Vente cuando quieras, Mari Carmen, que rápidamente te preparo una pizza y una sangría. Besitos.
ResponderEliminarMe encantan las pizzas y casi nunca las hago en casa, tendre que empezar a practicar, jijij.
ResponderEliminarTe ha quedado fantastica..
Bsss
Menuda pizza es tamaño XXL.Tiene que estar buenisima!!!!
ResponderEliminarBsss
Anímate, Celes, verás como te salen buenas a tí también. Besitos.
ResponderEliminarYo no soy muy pizzera..... pero debo reconocer que se ve expléndida...
ResponderEliminarBesitos